Necesito poder acceder nuevamente a mi cordura, asi que, por favor,
devolveme la llave.
Te la presté un rato, ni siquiera fui conciente de lo que hacía cuando te entregaba un objeto tan preciado, y se que en algún punto fue
mi
responsabilidad no haber sido más cauteloso, más lógico,
pero lo hecho hecho está
para ser deshecho y recomenzar, así que empecemos de cero, o no empecemos más, pero hay un punto en el que las cosas caen por su propio peso, y una pluma puede ser muy perniciosa... Somos tan delicados, a la corta.
Y por ahi planeando, sigilosa, con alas negras ocultas detrás de una mirada presuntuosa:
Una caricia húmeda en las orejas, un espasmo silencioso, ahogado. Cabellos erizados y un cosquilleo que se expande sin pedir permiso a cada miembro desprevenido. Frío y abrazos. Deseo y, por ahi sin darse cuenta: ¡OH DIOS! Un poco de inesperado "sentimiento"
Error de sistema:
Distancia. . . . . . . . . . . .
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