por Lautaro Aguilar

Escritura espontanea, vómito verbal, teatro, filosofía y vida.

Leé +

jueves, 24 de febrero de 2011

Lo de adentro que está escondido. Lo que no hace falta saber. El desencanto. La Desolación. La inercia. La vacuidad. La pena. La más terrible carga emocional. Las ganas, nomás... Las ganas.

Cuando uno se presenta acá
Arriba de estas tablas
y dice
"Hola... Este soy yo..."
¿Qué es lo que tiene que saber?
¿Estará bien lo que yo pienso? ¿Lo que yo opino al respecto? ¿O acaso también tengo que medir mi pensamiento verdadero con esto? Digo, esto, esto que el otro espera de mi. Esto que desconozco, pero que imagino... Esto que tanteo con los dedos todo el tiempo, para ver que pasa, para ver si me sale, de vez en cuando, cautivar.
Estoy, en realidad, seguro de que todo esto es, otra vez, una mentira.
Yo quiero creer que lo tengo bajo control. Pero no es asi. En realidad, mientras lo hago, ni siquiera lo intento. Nada más lo existo. Lo vivo con todos sus errores, y me río.
Me sorprende, a veces cuando pasa, querer cerrar el telón. O querer pedirle al público que, por favor, baje los párpados un minuto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario