¡Es real!

¿Cuántas veces he jugado a esto? ¿Tenés un lunar en el pecho? ¿Era verde o azul? ¿Tanto?. Creo que me sumerjo en un misterioso encuentro, pero no lo recuerdo, ni lo añoro. Mis síntomas, doctor, no coinciden con su veredicto. ¡Fíjese bien! Prometo pagarle mucho dinero. Miedo. Si, puede llamársele así. Pero también tengo recuerdos que se me perdieron, no se donde están. No es que me preocupe, doctor, no los quiero... Pero, me gustaría comprender. Usted está ahí, haciendo poco, como siempre... Si se ocupase tal vez obtendría una respuesta. Esto no puede ser tan complicado, de eso estoy seguro. La cicatriz, ¡ Obsérvela, doctor! Y explíqueme como puede ser que se haya grabado en mi piel esta caricatura deliciosa. ¿Cuándo se erigió este chaleco antibalas en mi piel? Los anticuerpos supieron actuar, al parecer el instinto de supervivencia es real.